18.3.13

Había abandonado este espacio porque comencé a pensar que dedicarle gran tiempo de mi vida a la tecnología era realmente una pérdida de tiempo. Hasta que me machuqué el dedo gordo con la puerta la semana pasada y me dejó imposibilitada de escribir con papel y bolígrafo, lo que me llevó a un estado constante de ansiedad y deseos de escribir absolutamente todo el tiempo y tuve que empezar a hacerlo a través de documentos de Word, aunque escribir en computadora es verdaderamente un fiasco y escribir en computadora y que además nadie lo vea, es un doble fiasco. Quizá me es necesario escribir acá por esa necesidad estúpida de sentir que alguien puede llegar a identificarse, o al menos llegar a leer y decir 'Ah, mirá vos' o incluso hasta a odiarlo y pensar que soy pésima escritora, de todos modos sería imposible satisfacer mi necesidad de identificación por otro medio ya que hablando soy aún peor que escribiendo y nadie me soportaría. Me explayé en vano, la cuestión principal es que la tecnología me está cansando un poco, y a medida que encuentro gente que mira menos a los ojos y cada vez más a sus celulares, me deprimo un poco más que antes. No sé a dónde quieren llegar con tanta falsa espontaneidad cuando la única espontaneidad que vale la pena es la humana. Tu sonrisa espontánea me parece más pura que tu frase en twitter, por más original que sea, tu abrazo me resulta más necesario que tu mensaje de texto diciéndome 'te extraño' cuando podrías estar tocándome el timbre en ese mismo instante y dándome un beso de verdad.
Ahí está, chau.

2 comentarios:

  1. ¡Hola! ya desde el futuro en la ciudad de México. Soy pintora. Me conecto bien con tus escritos. Me gustan. ¡Me gusta la manera del diálogo interno! Gracias!!!

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